San Lorenzo se lo empató con los pibes al subcampeon Tigre

San Lorenzo y Tigre empataron 1-1 en el Nuevo Gasómetro por la fecha 5 de la Liga Profesional. El Matador gritó primero con un buen gol de Lucas Blondel, quien anotó el 1-0 con un zurdazo en el primer tiempo. En el segundo, el Ciclón lo fue a buscar y se encontró con el empate en por un penal de VAR que transformó Adam Bareiro. El detalle estuvo en que a los 15' del PT el árbitro Ariel Penel se lesionó y que tuvo que ser reemplazado por Héctor Paletta, el cuarto.

Hay dos maneras de ver el momento de San Lorenzo en estas cinco fechas. Porque el equipo de Rubén Darío Insua no perdió ya que sumó su cuarto empate más la victoria de la fecha pasada vs. Central Córdoba. Pero, al mismo tiempo, sigue sin ganar como local en lo que va del 2022 y ya son 10 partidos

Más allá de los números, el balance tiene que ser positivo. Porque los pibes (Batalla y Jalil Elías fueron los más grandes del 11 con 26 años) volvieron a dar la cara y demostraron su esfuerzo ante la gente. Y más aún tras encontrarse en desventaja con lo que también fue una jugada aislada que resolvió muy bien Tigre en la primera parte.

Sin Cerutti, tocado tras su buen partido en Santiago del Estero y renovar, el DT le dio la chance desde el arranque a Iván Leguizamón. El pibe de 19 años que venía de ser clave vs. Arsenal y el Ferroviario, fue de lo mejor y se ganó la ovación de la gente cuando salió antes del final. Pero las cosas también cambiaron cuando entró Nahuel Barrios por un flojo Braida y SL tuvo más la pelota.

Es cierto que le costó mucho llegar al área rival con peligro, pero de tanto merodear se dio la jugada en la que Adam Bareiro fue a buscar la pelota, se anticipó a Abel Luciatti quien lo terminó pisando. Difícil de ver de entrada para Paletta, tras la llamada del VAR y la revisión en cámara lenta lo cobró.

El paraguayo le reventó el arco a Manuel Roffo, quien atajó en lugar de Marinelli. Al ratito, el 1 le tapó otra al Perrito Barrios para que el 1-1 no se modificara más. Tigre también tuvo otras chances pero en todo el partido mostró que no está a ese nivel que lo hizo ser finalista de la Copa de la Liga hace semanas. Sin Prediger lesionado, Blondel se destacó por su buen gol y casi convierte otro.

Dentro del difícil contexto que vive el club y en una jornada en la que los hinchas le demostraron su enojo a la dirigencia, San Lorenzo demuestra e intenta más allá de jugar 3-4-3 o un 5-4-1 por momentos. El sacrificio se paga a la espera de Gonzalo Maroni, el nuevo refuerzo que ya se entrena y le puede aportar fútbol. Más aún ante la situación de Martegani y las fuertes declaraciones de Insua.