CARAZA ZONA CUERVA

 Hay que ir a los detalles para entender por qué EL CICLON se llevó un triunfo inverosímil, y hasta milagroso si se observa cómo esa pelota pasó de largo a centímetros del palo a los 51' del segundo tiempo. Ése, por ejemplo, fue uno de los detalles: la suerte no estuvo del lado de defensa y sí se cruzó a la vereda del Ciclón, que luego de un arranque en el que encontró soluciones gracias a los pibes (Fernández Mercau y Siro Rosané marcaron sus primeros goles en Primera) sostuvo los tres puntos en la experiencia de un inoxidable Sebastián Torrico   Intensidad. Una palabra que para Paolo Montero es sagrada y que precisamente no le sobra a su San Lorenzo . De hecho, el Ciclón recién consiguió soltarse y manejar los tiempos del partido cuando Fernández Mercau aprovechó dos rebotes en la barrera y sacudió con un zurdazo esquinado, imposible para Unsain.  Porque hasta entonces, esa línea de cinco defensores que planteó el DT parecía estacada frente a defensa que manejaba la pelot

  El Ciclón fue superior, pero erró mucho y Central aprovechó: 1-0 con gol de Martínez Dupuy. CASLA no levantaCabeza   Su puesto en la tabla lo delata: si San Lorenzo está hoy entre los últimos es porque no puede transformar en goles las buenas llegadas que genera, por más claras que sean. Ayer tuvo varias, no las concretó y del otro lado le metieron una piña de knockout a minutos del final, porque Rosario Central sí supo capitalizar una de sus chances, que fueron pocas en comparación a las buenas intenciones que mostró.   De arranque nomás, el equipo del Kily González se llevó puesto a un pasivo San Lorenzo ganándole en los anticipos y filtrándole jugadores entre la línea de tres. Así pudo haber llegado el primer gol: tras una gran jugada de Blanco (tarde-noche top), Ruben tiró un buen centro atrás y Zabala no festejó porque Pittón salvó de última. Pero el Ciclón se acomodó, fundamentalmente desde la tenencia de Ortigoza y la movilidad de Cerutti y Uvita Fernández: fueron

SAN LORENZO pasó de la voracidad del 3-0 a Patronato a no poder encontrar los caminos frente a un platense que le empató el partido aprovechando un error del que nunca falla: Sebastián Torrico.   En Vicente López no se vio la remake de la semana en el Bidegain y por momentos al Calamar se lo notó más cómodo a la hora de iniciar la búsqueda con pelota dominada y de contra. En un terreno rápido, complicado para hacer pie, ambos generaron sus oportunidades para intentar salir mejor parados del PT. Los de Paolo Montero trataron de manejar más la pelota y progresar en campo,   aunque les costó encontrar sociedades en ese 3-4-2-1 que lo tuvo a Di Santo obligado a pensar más en bajar a asociars e y encontrar la pelota que a definir. De hecho, de su buena visión de juego -bien retrasado-   se gestó la más clarita: gran pase a espaldas de los centrales que dejó mano a mano a Uvita Fernández, que increíblemente la tiró afuera . Pudo ser del Ciclón, sí, pero también de un Calamar que con su lib