CARAZA ZONA CUERVA

San Lorenzo  dio un paso importante hacia el título al derrotar a  Independiente  en Avellaneda. "El Ciclón" logró su quinta victoria consecutiva y se impuso por  1-0  ante un equipo que también buscaba una victoria para mantenerse en la pelea. En los primeros minutos parecía que los de Pablo Guede salían decididos a hacerse dueños del juego pero, pronto, los locales tomaron las riendas del juego y lograron controlar las acciones en terreno rival. Con un buen rendimiento colectivo y una actitud netamente ofensiva, los de Pellegrino lograron generar llegadas claras. Primero, con un remate de Fernández que se fue cerca y, luego, con una aparición de Ortiz por izquierda que obligó a Torrico a esforzarse para mandar la pelota al córner. Recién sobre los 25 minutos "El Ciclón" logró salir del asedio, aún de manera transitoria, y avisó con una chilena de Cauteruccio que se fue cerca del segundo palo del arco defendido por Campaña. Pero el conjunto de Avellane

Como marca la historia, Entre San Lorenzo y Buracán de parque poquitos el ciclon   volvió a demostrar que este es el clásico más desparejo del mundo. En títulos, gente, socios, y también en partidos entre sí, ya que con este 1-0 en el Pedro Bidegain, ya son 33 los partidos que el Ciclón aventaja al Globo.  Si bien el equipo de Pablo Guede jugó mal, el rival nunca se mostró superior, y apeló a remates de media distancia para inquietar a Sebastián Torrico. San Lorenzo, en cambio, estuvo ordenado atrás, pero le faltó volumen a la creación y ser más punzante en ataque en los primeros 45 minutos. En la segunda parte, el partido cambió con el ingreso de Pablo Barrientos por Franco Mussis. El Pitu se entendió con Néstor Ortigoza, quien lo habilitó dentro del área para que Nicolás Blandi termine empujando su centro tras un mal cierre del defensor Mancienlli. Con el 1-0, el Ciclón estuvo más tranquilo, pero no logró liquidarlo. Baliño cobró correctamente un penal de Bogado por mano, pero

Dio una muestra de carácter el elenco de Boedo en una semana complica por la eliminación en la Copa Libertadores y ante su gente se subió a la cima del zona 1 del Torneo de Transición 2016. En un Nuevo Gasómetro con poco público,  San Lorenzo se impuso por 2 a 1 a Rosario Central  en un duelo por la pelea del campeonato. Así, el conjunto que dirige Pablo Guede es líder con Godoy Cruz ambos con 21 unidades. Empezó mejor la visita y con un gol de penal de  Marco Ruben  se puso en ventaja a los 15' minutos de juego pero el  Ciclón  reaccionó y con tantos de  Matías Caruzzo  de cabeza en el cierre del primer tiempo y  Franco Mussis  con una volea impecable a los 10' del complemento revirtió el resultado. Fue un partido vertiginoso con dominio repartido y mucha fricción. Los rosarinos comenzaron mejor, con la presión alta y las recuperaciones de Musto en el medio encerraron a su rival desde el comienzo. Así llegó el gol de Ruben y pudo ampliar en los minutos siguientes mi

Era el encuentro  que había que ganar, de esos difíciles de lograr pero que cuentan con un sabor más que dulce después de ser cosechados. San Lorenzo tenía, tal vez, la parada más brava del campeonato local.  Fue a Mendoza contra un Godoy Cruz puntero que venía de bailar 4-1 a Vélez pero se le plantó de igual a igual y se quedó con el triunfo por 1-0.  Así, dejó en claro que está más vivo que nunca en el torneo local y se puso a dos puntos del líder, que justamente es el Tomba. El primer tiempo entregó a un Godoy Cruz más ordenado y buscando la ventaja. Sin embargo, el correr de los minutos fue haciendo crecer a San Lorenzo y el tándem Ortigoza-Mercier, más Belluschi en ataque, fueron empujando el juego hacía el área del Tomba. El gol estaba lejos hasta el inicio del complemento, donde  los de Guede salieron disparados y se encontraron con la diferencia de forma express: centro de Mas y empuje del ingresado Cauteruccio. Esta vez el Ciclón se hizo amigo del reloj y aprovechó el paso

. Un mal inoculado en el fútbol argentino desde hace ya unos cuantos años, sigue vivito y coleando y parece difícil de erradicar. El análisis de un partido sólo en función del marcador final es el no-análisis. Porque si así fuera, habría que decir "ganó tal equipo" y punto. Nada para discutir ni comentar. Pero la histeria y la intolerancia que impera en las tribunas de las canchas argentinas no tiene que confundir. Cada partido tiene su propia lectura, su propia historia.   Y el de San Lorenzo-Belgrano es un buen ejemplo. La sensación, tras los 90 minutos, es que ni Pablo Guede era el padre de la derrota en el 0-2 parcial ni fue el padre de la victoria tras el 3-2 final. Desde que el ex entrenador de Chicago y Palestino arribó al Ciclón, con su promesa de aplicar un juego ofensivo, los cultores del "ganar como sea" posaron la lupa sobre cada una de sus acciones y dejaron en un rol secundario la performance de los futbolistas, quienes son, en definitiva, los verd