Sacrificio, esfuerzo, oportunismo y la cuota justa de orden ypaciencia para lograr una victoria en un terreno que parecía inquebrantable. Estudiantes consiguió traerse tres puntos del Nuevo Gasómetro y derrotar a un San Lorenzo que llegaba en su apogeo futbolístico. Así, además se cargó a un competidor directo en la lucha por el título y sigue como único líder del torneo.
Ante semejante resultado, el análisis futbolístico tal vez quede en segundo plano para el hincha platense. El Pincha quebró rápido de la mano de Lucas Rodríguez pero, cuando se retrasó, sufrió un golazo de Blanco que volvió a firmar tablas en el marcador. San Lorenzo, con la moral en alto tras el empate, fue por todo, pero la expulsión de Mussis apenas comenzada la segunda parte lo dejó rengo.
La superioridad numérica invito al crecimiento Pincharrata y, tras una carambola en el área, Damonte se tiró de palomita para poner el tan buscado 2-1. Lo gritó con alma y vida, con beso al escudo incluido y destilando el desahogo que tenía atragantado. El Ciclón, naturalmente, se vino contra Losada, pero entre el arquero y un poco de fortuna evitaron la segunda igualdad.
Triunfazo para Estudiantes y 19 puntos en apenas siete fechas. Esta vez, ganó una de las batallas más difíciles que le planteaba el calendario en su sueño por conquistar el objetivo final. Fue una victoria, fueron tres puntos, pero sobre todo fue una inmensa muestra de carácter.
LES DEJO EL GOL DEL CICLON
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