Recuperate pronto tonga

Y un día apareció. Gastón Aguirre dio el presente en la Ciudad Deportiva de San Lorenzo, casi una semana después de haberse lesionado en el Monumental. Discreto, ingresando hasta la puerta misma del vestuario en una camioneta, para evitar el largo traslado desde el estacionamiento hasta allí, habida cuenta de que carga un yeso en la pierna derecha y se mueve con muletas. Entonces, él mismo devela la incógnita: "La verdad es que esto es un garrón, pero no me siento mal. No tengo dolor y eso es clave. Eso sí, me embolo como loco y no veo la hora de poder tirar las muletas para empezar a moverme más cómodo".
-¿Estuviste hablando con los médicos?
-Algo, pero quería pasar a ver a mis compañeros: no los había visto después de la lesión.
-Igual, imagino que habrás hablado con ellos.
-Sí, me llamaron, me contaron que no querían joderme, pero por suerte estoy mejor de lo que pensaba. Ahora van a tener que aguantarme porque cuando pueda moverme más voy a venir a tomar mate con ellos. Y cuando pueda, voy a ir a la cancha.
Tiempo al tiempo, Tongas. El zaguero, operado el viernes por la rotura del tendón de Aquiles del tobillo derecho, sabe que la recuperación será larga: se habla de entre cuatro y seis meses de plazo. Justo cuando el defensor estaba negociando para renovar vínculo con el club, ya que tiene contrato hasta junio. Ahora, seguirá, pero se encarga de aclarar "que igual yo iba a seguir. Ya estaba todo preparado para firmar contrato. Nunca lo dudé y ya estaba todo arreglado con la gente de San Lorenzo, donde estoy muy cómodo, porque me trataron más que bien y siempre aspira a cosas importantes. Es cierto que me costó ganarme a la gente y por ahí muchos no estén conformes conmigo, pero soy muy feliz por vestir esta camiseta". Tiene razón Aguirre, aunque la lesión modificará el acuerdo, debido al convenio laboral de Futbolistas Argentinos Agremiados. Sin embargo, eso es lo de menos para el defensor. De movida, lejos de mostrarse preocupado, sale a bancar a Fernando Meza, su reemplazante natural: "Ya viene trabajando con el plantel de Primera desde hace muchísimo tiempo. Creo que necesitaba de esos tres o cuatro partidos que necesita todo jugador para afianzarse y para demostrar que puede jugar; y esto le viene bárbaro. Obvio que a mí no me gusta estar lesionado, pero teníamos una sana competencia, lo venía demostrando en las prácticas y por eso el técnico lo pone. No va a poner a alguien que no esté a la altura".
Atrás ya quedó la anécdota del momento de la lesión ("le dije al Pitu Abelaires 'qué patada que me pegaste'. Y cuando él me dijo que no, me acordé de que al padre de un amigo le pasó que sintió un ruido como si le hubieran pegado un piedrazo en el tobillo y se había roto el tendón. Ahí pedí el cambio y no me moví más", narra). Por delante, buena onda para salir del paso. "Estoy podrido de estar acostado, pero al menos tengo el consuelo del apoyo de la gente que me llama, de los compañeros que me hicieron una bandera tremenda y, sobre todo, la paciencia de la familia", espanta fantasmas, confiando en acelerar lo más posible los tiempos de recuperación.

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL CICLON SE ACORDO DE GANAR

NO SE PUDO DESCUBRIR AMERICA