Segui asi sin creertela te va a ir bien siempre

Como niño con juguete nuevo. Desparrama alegría, deja abandonado a pleno rayo del sol su vehículo (acompañantes adentro) para hablar con cada periodista que se le acerca, recibir las hurras de los empleados del club y ensanchar un poco más su sonrisa. Fabián Bordagaray sabe que su partido, y aun más su gol frente a Atlético, fue un pequeño paso para la ilusión de San Lorenzo. Pero un gran paso para su confirmación en la delantera del Ciclón. Sin embargo, el Nueve predilecto del Cholo prefiere la prudencia.

"Acá nadie tiene el puesto asegurado, hay muchos jugadores que son de primer nivel. Tengo que estar tranquilo y seguir laburando de esta manera", dijo el ex Defensa y Justicia, siempre medido. Aunque, claro, no es lo mismo la humildad que la ignorancia. Borda sabe muy bien que Simeone se la jugó por él y que le está rindiendo.

"¿Si me siento más seguro? Sí... igual no sé si soy o no titular. Tengo que ganarme la confianza en mí mismo y estar siempre lo mejor posible. Me motiva mucho poder convertir seguido. Pero espero continuar así, rindiendo a la hora de entrar a la cancha", dijo el joven de 22 años. Bordagaray no sólo se está ganando la autoconfianza. También está logrando que Simeone, quien insistió con ahínco para contar con el goleador uruguayo Emiliano Alfaro, lo banque como el punta de su equipo junto al Papu Gómez.

Razones no le faltan. Bordagaray la mandó a guardar en los últimos cuatro encuentros de San Lorenzo. Cerró el Apertura metiéndole dos a Newell's para soplarle el sueño de campeonato, y siguió de racha en el verano frente a Boca y Estudiantes, haciendo un gol por partido. Y el sábado, en el primer desafío por los puntos, apareció en el lugar indicado para juntar el rebote del travesaño tras el centro de Gómez (ver Jugada casi...) y mandarlo a la red.



"Acá lo importante es ver que el grupo esté bien, armar un proyecto entre nosotros y tratar de sacar la cosa adelante fecha tras fecha", confió. "Buscamos pelear en lo más alto. Pero esto recién empieza. Para estar arriba, primero hay que estar tranquilos".



Mucho cambió su importancia en el plantel desde que trocó Florencio Varela por Boedo, el año pasado. Después de su primer partido, Simeone ni recordaba su apellido. "Este chico Fabián", lo había nombrado. Ahora, a fuerza de goles, Bordagaray es el acompañante indiscutido del Papu. "Sigo viviendo en el mismo lugar de siempre, en cuanto puedo voy a ver a mis compañeros de Defensa", dice. Y admite que intenta dejar de lado un estilo provocador que le valió más de una bronca en la cancha. "Voy a aprovechar cada minuto", jura. Ya lo está haciendo